miércoles, 9 de octubre de 2013

Calendario Curso Pastoral 2013-2014

CALENDARIO
2013-2014

Octubre.-
·      30-6, inicio catequesis parroquial.
·      11, inicio pastoral juvenil.
·      10, inicio confirmación adultos.
·      12, Fiesta del Pilar.
·      18, escuela de catequistas.
·      18-20, asamblea regional JEC. Convivencia Emaús.
·      20, apertura sector ENS.
·      20, DOMUND.
·      26, Consejo pastoral arciprestal.
·      26, Consejo Extremadura OFS.
·      29, charla año de la fe.

Noviembre
·      5, charla año de la fe.
·      9, encuentro estatal animadores JEC.
·      9, formación animadores Pastoral Juvenil.
·      12, charla año de la fe.
·      12 - 13, formación permanente clero.
·      15-17, cadena oración pastoral juvenil.
·      15, Escuela de catequistas.
·      17, Iglesia Diocesana.
·      19, Charla año de la fe.
·      30, Clausura del Año de la fe en Guadalupe.

Diciembre
·      2 al 6 semana fe – cultura.
·      7, Vigilia diocesana de la Inmaculada para jóvenes en Mérida.
·      14, retiro adviento franciscanas y animadores jóvenes.
·      21, retiro adviento parroquia.
·      25, Navidad.
·      29, Sagrada familia. Aniversario bodas oro y plata.

Enero
·      7, martes, encuentro sacerdotal.
·      12, renovación bautismo niños comunión.
·      18, sábado, presentación por vicarias de la carta pastoral arzobispo.
·      25, sábado, en Llerena, encuentro con agentes de pastoral familiar.
·      25, consejo pastoral arciprestal.

Febrero
·      1, consejo diocesano de pastoral.
·      6, colegio de arciprestes.
·      7, encuentro del arzobispo con consiliarios de cofradías.
·      14-16, Convivencia Emaús.
·      15, jornada formación apostolado seglar.
·      16, encuentro diocesano con hermandades y cofradías
·      18 y 19, formación permanente clero.
·      21, entrega de diplomas de la EFBA
·      22, asamblea diocesana de Acción Católica

Marzo
·      5, miércoles de ceniza.
·      7-9, Triduo a Jesús de la Humildad.
·      8, sábado, asamblea diocesana de caritas
·      15, encuentro diocesano de catequistas
·      19, San José, día seminario.
·      21-23, ejercicios espirituales pastoral juvenil.
·      22, retiro cuaresma parroquia.
·      28-30, Triduo Ntra. Sra. Mayor Dolor.
·      28-30, cadena oración pastoral juvenil.

Abril
·      4-11, Septenario Virgen de los Dolores.
·      5, sábado, jomada diocesana de jóvenes en Fuente del Maestre.
·      12, pregón Semana santa.
·      14 al 20, semana santa.
·      14-16, triduo Jesús de la Humildad.
·      26, encuentro de monaguillos.
·      24-26, Triduo Virgen de la Cabeza.
·      27, Virgen de la Cabeza.

Mayo
·      3, encuentro diocesano profesores religión.
·      4, domingo, institución de ministros extraordinarios de la comunión.
·      4, comuniones San José.
·      15, San Isidro, romería.
·      16-18, cadena oración pastoral juvenil.
·      18, primeras comuniones Miguel Garrayo.
·      24, encuentro agentes pastoral de la salud.
·      25, primeras comuniones Cruz Valero.
·      31, consejo pastoral arciprestal.

Junio
·      7, vigilia de pentecostés.
·      8, Pentecostés y día del apostolado seglar
·      13, entrega de diplomas de la ·EFBA
·      21, Corpus Christi

Julio
·      Campamento JEC.
·      Asamblea nacional JEC.

Agosto.
·      1-8, Campamento Emaús.

·      Campamento Parroquial niños.

sábado, 9 de febrero de 2013

MOVIMIENTOS DE ACCIÓN CATÓLICA “COMUNICADO SOBRE LOS DESAHUCIOS”


Éste es el comunicado íntegro:

FEDERACIÓN DE MOVIMIENTOS DE ACCIÓN CATÓLICA “COMUNICADO SOBRE LOS DESAHUCIOS” 
El tener un lugar para vivir es una cuestión que afecta directamente a la dignidad de las personas y a su desarrollo social, personal, familiar o afectivo. Cuando un derecho, recogido por la Constitución (art. 47), se deja en manos de la especulación y de la economía más injusta, se está poniendo en peligro el acceso libre de la población a este derecho fundamental.
Durante años, en España, como en otros países, se han puesto por delante del interés general los intereses de los grandes bancos. Se han concedido hipotecas de alto riesgo para especular con ellas en los mercados y mover ingentes cantidades de dinero que nunca existió. Cuando esta actividad de crecimiento y enriquecimiento exponencial se acaba, son las personas que están debajo en la pirámide de la economía las que tienen que pagar los platos rotos.
Paralelamente, en España nunca se ha desarrollado verdaderamente el mercado del alquiler, lo que contribuyó a fomentar la compra de vivienda. La realidad de los desahucios en España es una de las consecuencias más dramáticas de todo este sinsentido que está siendo la situación económica actual.
Vemos cómo diariamente se manda a vivir a la calle a familias enteras, cuando hay una cantidad enorme de pisos vacíos en todo el país. Todos conocemos, en nuestras ciudades y pueblos, zonas en las que la construcción más salvaje ha dejado edificios sin vender y que van a echarse a perder antes de ser utilizados, sin embargo, los bancos y cajas, algunos de los principales responsables de toda esta situación, ejecutan los desahucios sin límite.
Junto a los bancos y las cajas, se han beneficiado de la especulaciónayuntamientos, inmobiliarias, ciudadanos que aprovecharon la situación… Es más que alarmante el papel que los gobiernos han adoptado. Por un lado, permitieron en su momento el crecimiento de hipotecas “regaladas” y la especulación sin mesura que, hasta el más desinformado, sabía cómo iban a acabar.
Por otro lado, ahora no son capaces de modificar las injustas leyes que crearon porque no quieren enfrentarse a las grandes entidades que les financian y aseguran puestos de consejeros para su retiro. Además, ponen al servicio de intereses particulares a funcionarios del estado que deberían ser los garantes del interés general.
Cada familia que se ve en la calle, cada suicidio inducido por la desesperación, cada piso sin utilizar almacenado por los especuladores …son un grito contra este sistema, un clamor contra aquellos que piensan en el mundo como un gran tablero de juegos, en el que las personas somos fichas que pueden mover a su antojo para llenar sus bolsillos.
Ante todo esto, ¿qué tenemos que decir los cristianos y cristianas?Jesús nos exhorta una y otra vez en el Evangelio a estar al lado de los más necesitados, a fijarnos en los últimos, a acercarnos a los que están “sentados junto al camino” (Lc 18, 35). Son estas personas las que están sufriendo más directamente las consecuencias de la crisis y el despropósito de los desahucios.
Como Iglesia no podemos quedarnos al margen de esta realidad, tenemos que ser sensibles al sufrimiento de tantas personas y estar activos en la búsqueda de alternativas a esta situación. En este Año de la Fe, que la Iglesia nos propone, releemos en el Catecismo de la Iglesia: “Los traficantes cuyas prácticas usurarias y mercantiles provocan el hambre y la muerte de sus hermanos los hombres, cometen indirectamente un homicidio. Éste les es imputable.” (CIC 2269)
En el documento que nuestros Obispos publicaron el 3 de octubre, “Ante la crisis, solidaridad”, se pide “que los costes de la crisis no recaigan sobre los más débiles”. Es nuestra tarea como cristianos y cristianas en el mundo de hoy proponer alternativas, buscar soluciones y encarnarnos en estas realidades de precariedad y sufrimiento.
Hemos de abordar el problema de los desahucios, colaborando directamente en la búsqueda de una solución y proponiendo como Iglesia, medidas de urgencia, y además no renunciar a la siempre necesaria denuncia de las causas (estructurales, morales y culturales) que están en el origen de la presente situación.
En otro documento de la Conferencia Episcopal: “Declaración ante la crisis moral y económica” se nos anima a los y las cristianas “a discernir el momento presente y a comprometerse con generosidad y solidaridad”. Como Acción Católica, general y especializada, nos sentimos muy cercanos a todas estas realidades e intentamos ser testimonio de esperanza y compromiso contra las consecuencias de la crisis que están empobreciendo, aún más, a los últimos, poniendo en una situación de extrema necesidad a gran parte de la población del país.
Si bien esta crisis la provocaron unos pocos por acción y muchos por omisión, somos la inmensa mayoría quienes la estamos sufriendo. Es desde esta mayoría desde donde tiene que venir la alternativa a esta situación y, como Acción Católica, queremos y debemos estar presentes en esta construcción de un mundo más acorde con el plan de Dios, otro mundo posible y necesario.
En consecuencia animamos a los y las militantes de la Acción Católica y a toda la comunidad cristiana, a apoyar las distintas propuestas que se están desarrollando en España, como por ejemplo la Iniciativa Legislativa Popular que propone:
1. Que se reconozca la dación en pago en la ejecución hipotecaria.
2. Que se paralicen los desahucios cuando se trate de la vivienda habitual y el impago del préstamo sea debido a motivos ajenos a la voluntad del hipotecado.
3. Que se reconozca el alquiler social. De manera que el ejecutado pueda seguir residiendo en la vivienda pagando un alquiler no superior al 30 % de sus ingresos. Presentamos estas líneas con la única pretensión de ser una reflexión sobre uno de los aspectos de la crisis que nos afecta y nos impulse a todos a sostener a quienes más sufren en este momento y a trabajar por una sociedad más justa.

jueves, 31 de enero de 2013

Cura de La Fuente: La cuaresma

Cura de La Fuente: La cuaresma: La Cuaresma Introducción Cuaresma viene del latín  “quadragesima dies”, el día cuadragésimo antes de Pascua. Tiempo que nos prepar...

La cuaresma


La Cuaresma

Introducción

Cuaresma viene del latín  “quadragesima dies”, el día cuadragésimo antes de Pascua. Tiempo que nos prepara para la celebración de la Pascua de Resurrección. Empieza el miércoles de ceniza y concluye el Jueves Santo por la tarde, antes de la Misa Vespertina de la Cena del Señor, con la que se inaugura el Triduo Pascual.

La Cuaresma se organizó a partir del s. IV. Su historia anterior no está muy aclarada. parece ser que el germen original fue el ayuno pascual de dos días, el Viernes y el Sábado antes del Domingo de resurrección, espacio que poco a poco se alargó a una semana, luego a tres, y según las diversas regiones, sobre todo en las de Oriente, como Egipto, hasta las seis semanas o cuarenta días. En Roma ya estaba constituida la Cuaresma entre el año 350 y 380.

A la hora de dar sentido a este período como preparación a la Pascua, influyó ciertamente el simbolismo bíblico del número cuarenta, los episodios  de:
            - los cuarenta días del diluvio antes de la alianza con Noé;
            - Moisés y sus cuarenta días en el monte;
            - del pueblo de Israel y sus cuarenta años por el desierto;
            - de Elías caminado cuarenta días hacia el monte del encuentro con Dios;
            - y sobre todo los cuarenta días de Jesús en el desierto antes de empezar su misión mesiánica.

Todos estos episodios tienen de común que este espacio de tiempo sirve de prueba, purificación y preparación de un acontecimiento importante y salvador.

La cuaresma comenzaba originariamente en domingo. Pero más tarde (s. VI-VII) se acentuó como característica determinante el ayuno, y como los domingos no se ayunaba, se adelantó su inicio al miércoles anterior al primer domingo, el que luego se llamó ceniza, para que a la Pascua le precedieran cuarenta días de ayuno festivo.

Sentido de la Cuaresma, preparación de la Pascua

El sentido de la Cuaresma cristiana se puede resumir así: la Cuaresma nos introduce en la celebración, cada año más intensa, del Misterio Pascual de Cristo.

Para Cristo el Misterio Pascual es su paso triunfal de la muerte a Vida. El misterio total de la Pasión, Muerte, Resurrección y Ascensión. Es el Paso = Pascua, el gran suceso de la historia, el acontecimiento salvador por excelencia. Acto vital, dinámico del Dios poderoso, que nos salva de la muerte por la Muerte de su Hijo y nos introduce en la vida por la Vida nueva de Cristo.

Para nosotros, el Misterio Pascual es la participación en la muerte, resurrección y ascensión de Cristo. Se trata de que también nosotros pasemos, que nos incorporemos al tránsito pascual del Cristo cada año más profundamente.

La Cuaresma no es, pues, fin en sí misma, sino que culmina y se perfecciona en la Pascua. El proceso pascual decisivo para cada cristiano se realiza en tres tiempos:

1. Morir al pecado y al mundo; morir al egoísmo, que ya es estrenar nueva existencia;
2. Celebrar con Cristo el nacimiento a la nueva vida;
3. Vivir con nueva energía y entusiasmo: como niños recién nacidos.

La incorporación creciente al misterio de la Pascua de Cristo la expresa la liturgia cuaresmal en una palabra: conversión. La palabra griega “metánoia” significa “cambio de mentalidad”. La latina “con-versio” viene a indicar lo mismo: “vuelta, cambio de dirección”. Los textos cuaresmales insisten en:

- que nuestra mentalidad mundana, lejana al evangelio, se convierta en mentalidad cristiana;
- que nuestros caminos de pecado, nuestra vida carnal y materialista, se dirijan ahora por los caminos de la gracia, una vida según el espíritu;
- que donde reinaba el egoísmo, cerrando las puertas a Dios y al prójimo, se inaugure una apertura de docilidad para con Dios y de amor práctico para con el prójimo:

Un cambio, una nueva dirección en la vida. Empezando por la mentalidad, que es la raíz de toda conducta.

Medios que la Cuaresma nos ofrece

a) La Palabra de Dios: La iniciativa siempre parte de Dios. La Iglesia se hace Catecúmena. Nos sentamos de nuevo en la escuela de la Palabra, apara aprender. Cuaresma entonces es tiempo de meditación en la Escritura la verdadera imagen de la Iglesia en cuaresma no es solamente la de un pueblo que ayuna y llora, vestido de saco y ceniza, sino sobre todo la de una comunidad que se recoge en escucha orante de la Palabra de su Señor.

b) Intensa oración: la lectura de la Palabra de Dios nos lleva a una inmensa oración. La reforma que hay que cumplir en la Cuaresma no se puede realizar sin la ayuda de Dios. Es Él el que purifica nuestro ser, el que nos renueva, el que convertirá nuestro viejo Adán en el nuevo Cristo. Y por eso nos postramos en oración: pedir y se osa dará, buscada y encontraréis. Oración personal y oración litúrgica, colectiva. En unión de toda la Iglesia.

c) Participar mejor en la Celebración Eucarística: La oración, sobre todo, de la Eucaristía. La Eucaristía como fuente de nuestra reforma y como muestra de nuestra inserción en el misterio pascual.

d) El Ayuno: Con la Palabra y la Oración, la Cuaresma estimula en nosotros un trabajo personal colectivo de Ayuno.
            Un ayuno con dimensiones profundas y personales. No el ayuno reducido a la abstinencia de alimentos  eso sería tergiversar el sentido de la penitencia, que debe ser una vuelta de toda la personalidad a Dios.
            Este es el ayuno principal  la lucha contra el pecado en nosotros mismos. Si uno se priva de un plato de carne, pero no de su rencor y de su deseo de venganza, se ha quedado meramente en la superficie de su ayuno. La renovación interior va así acompañada y favorecida por una austeridad exterior que en la práctica puede adoptar muchas modalidades. El que no quiere renunciar a nada, el que se concede a sí mismo todo en la comida, en la diversión, en el placer, es señal de que no se ha puesto en clima de conversión pascual. El privarse de algo es signo de nuestra vuelta a lo esencial en la vida: Dios y sus caminos.

 


e) La práctica de la Caridad: una de las señales de la recta inteligencia del ayuno es que termine en la caridad. Ayunar para dar al prójimo. “Lo que cada uno sustrae a sus placeres, lo dé a favor de los débiles y pobres” (S. León, en un sermón cuaresmal).
            El ayuno cuaresmal no es meramente negativo, sino que renuncia a nuestras apetencias, para abrir las puertas a Dios (oración y lectura) y al prójimo (caridad). Las dimensiones del más auténtico cristianismo: “dejar libres a los oprimidos, partir tu pan con el hambriento, hospedar a los pobres sin techo... el ayuno que yo quiero es éste (viernes de ceniza); misericordia quiero y no sacrificios (sábado 3º).

f) Celebrar el sacramento de la Penitencia: La reconciliación nos orienta, nos da fuerza, nos proporciona una ocasión magnifica para someter nuestras existencias de pecadores a la misericordia de Dios, que es el que en definitiva nos tiene que transformar. La preparación cuidadosa de la confesión en este tiempo, debe ser uno de los puntos de la catequesis cuaresmal. Y mucho mejor si se realiza comunitariamente. Con un tono eclesial que se va por fortuna redescubriendo en el sacramento de la Penitencia.


viernes, 25 de enero de 2013

¿SENTIRSE BIEN?


¿SENTIRSE BIEN?

No es difícil observar entre nosotros los rasgos más característicos del individualismo moderno. Para muchos, el ideal de la vida es «sentirse bien». Todo lo demás viene después. Lo primero es mejorar la calidad de vida, evitar lo que nos puede molestar, y asegurar, como sea, nuestro pequeño bienestar material, sicológico y afectivo.

Para lograrlo, cada uno debe organizarse la vida a su gusto. No hay que pensar en los problemas de los demás. Lo que haga cada uno es cosa suya. No es bueno meterse en la vida de otros. Bastante tiene uno con sacar adelante su propia vida.

Este individualismo moderno está cambiando la vida de los creyentes de occidente. Poco a poco, se va difundiendo una «moral sin mandamientos». Todo es bueno si no me hace daño. Lo importante es ser inteligente y actuar con habilidad. Naturalmente, hay que respetar a todos y no perjudicar a nadie. Eso es todo.

Va cambiando también la manera de vivir la fe. Cada uno sabe «lo que le va» y «lo que no le va». Lo importante es que la religión le ayude a uno a sentirse bien. Se puede ser un «cristiano majo» y sin problemas. Lo que hace falta es «gestionar» lo religioso de manera inteligente.

El resultado es una clase media instalada en el bienestar, compuesta por individuos respetables que se comportan correctamente en todos los órdenes de la vida, pero que viven encerrados en sí mismos, separados de su propia alma y apartados de Dios y de sus semejantes.

Hay una manera muy sencilla de saber qué queda de «cristiano» en  este individualismo moderno y es ver si todavía nos preocupamos de los que sufren. Lo dijo Jesús con claridad: «A mí el Espíritu de Dios me envía a dar una Buena Noticia a los pobres». Ser cristiano no es sentirse bien ni mal, sino sentir a los que viven mal , pensar en los que sufren, reaccionar ante su impotencia, no refugiarnos en nuestro propio bienestar.

No hay que dar por supuesto que somos cristianos pues puede no ser verdad. Nos tenemos que preguntar si vivimos según lo que nos parece o si nos dejamos alguna vez conducir por ese Espíritu que a él lo llevaba hacia los que veía sufrir.

martes, 8 de enero de 2013

A TI JOVEN QUE TE PONES EN LA ÚLTIMA FILA


…que sueles llegar tarde los domingos a Misa porque siempre hay otro plan; o porque te da pereza escuchar “lo mismo de siempre”, o porque hay partido. Que te pones al final porque así sales antes, o sientes que los que se ponen delante están más comprometidos que tú. Que tus padres ya no te obligan a ir con ellos, pero de alguna manera sientes que tienes que ir. Que si puedes, vas con algunos amigos, te pones al final de la iglesia, y habláis de todo un poco.
Sin embargo, rara vez dejas de ir a Misa y la Cena de Jesús forma parte de tu vida. Muchas veces no sabes bien por qué vas, pero el caso es que celebrar la Eucaristía te hace querer ser mejor persona –aunque no siempre lo consigas–, y le da sentido al resto de la semana; porque el trabajo o los estudios a veces se hacen muy pesados y sientes que Dios te da fuerzas. Sabes que la fe es algo importante para ti, y aunque no hagas voluntariado ni pertenezcas a ningún grupo de jóvenes, quieres seguir dedicando parte de tu tiempo a cuidar tu relación con Dios y ayudar a los demás. Igual quieres hacer algo, pero no sabes muy bien cómo…
No te propongo que te pongas en la primera fila, no. Te invito a que descubras el potencial que tienes dentro de ti. A descubrir que Dios sólo te hará sacar lo mejor de ti y llevará tu idea de felicidad a la plenitud de una vida vivida al máximo. Te invito también a que te fíes de la Iglesia, formada por personas mucho más parecidas a ti de lo que imaginas, que te ayudarán a dar lo mejor de ti, y a elegir cuál es tu camino y a acompañarte, porque seguir a Jesús en solitario es muy difícil. La Iglesia necesita hombres y mujeres que, desde cualquier lugar, estén enamorados del Evangelio de Jesús y quieran comprometerse por construir un mundo más parecido al que Él sueña para nosotros.¿Te atreves?

A ti, joven de las últimas filas...